miércoles, 26 de febrero de 2014

El nivel educativo de los jóvenes en Guatemala: ¿trayectorias truncadas por la cobertura?

La Encuesta Nacional de la Juventud en Guatemala, levantada en el año 2011, recoge información de una muestra de 5,785 personas comprendidas entre los 15 y 29 años de edad.  Estas personas nacieron entre 1981 y 1994, y han estudiado en una época de ampliación educativa, por ejemplo la primaria llegó a superar el 90% de cobertura. Esto tiene un impacto directo en la trayectoria educativa de las personas y se esperaría un impacto indirecto en el desarrollo de la sociedad guatemalteca.

La trayectoria educativa en Guatemala inicia con el nivel primario, que comprende seis (6) años de estudio, luego viene el nivel medio que tiene un ciclo básico de estudios generales que dura tres (3) años y el ciclo diversificado, que incluye carreras de 2 y 3 años que preparan para el mundo del trabajo y la continuación de estudios en la universidad.  Finalmente está la educación superior. 

Las transiciones educativas, el paso de un nivel/ciclo a otro, tienen un papel central en la trayectoria educativa de las personas, ya que son momentos donde muchos pueden suspender los estudios.  Dentro de los factores que tienen un fuerte peso para garantizar el paso, o no, de la primaria a la media está la cobertura educativa, ya que no se tienen espacios educativos en primero básico (primer año de la media) para todos los que concluyen sexto primaria (último año de la primaria).  Lo mismo se puede observar en la transición del ciclo básico al ciclo diversificado, y mucho más del diversificado a la universidad.

El grupo de jóvenes encuestados tiene, en promedio, un nivel educativo del 8 grado, que supera los casi 5 años en promedio que tiene la población mayor de 15 años (para el año 2010).  Es decir que este grupo de jóvenes se caracteriza por ser una población con mayor educación que los grupos de edad mayores a los 30 años, para el año 2011.  Pero dentro de los promedios se pierde la posibilidad de observar las desigualdades educativas que existen aún en Guatemala.

Si tomamos el promedio de 8 años de escolaridad del grupo de jóvenes encuestados, podría tenerse la idea de que todos han concluido la primaria, pero al observar los datos de la encuesta se tiene que del 100% de los jóvenes, un poco más del 4% no ingresó a la escuela.  En el cuadro siguiente se puede observar en el eje x con el nombre de "escolaridad" el número de años de estudio reportados por el encuestado y en el eje y se observa el porcentaje de encuestados que sobrevivieron, es decir se mantuvieron estudiando.


La gráfica permite observar que de 100 personas, de la cohorte 1981-1994, solamente 95 lograron entrar a primero primaria.  Dentro de los primeros 6 años (la primaria) se observa que la escuela no logró mantener en sus aulas a 11 estudiantes, por lo que 84 personas lograron concluir sexto primaria.

El concluir sexto primaria no garantiza continuar los estudios ya que 12 personas, de las 84 que concluyeron sexto primaria, no pudieron continuar sus estudios.  Esta es la primera transición educativa a la cual 72 personas sobrevivieron.  En el ciclo básico la escuela no logran mantener incorporados a 7 personas así que concluyen los 9 años (tercero básico)  65 personas.  Estas 65 personas se enfrentan a la transición básico-diversificado.  De las 65 personas que concluyen el ciclo básico, 10 no sobrevivirán a la transición al diversificado.  Así que solamente 55 personas inician estudios de diversificado.  La transición del diversificado a la universidad solo fue lograda por menos de 25 personas, de las cuales 15 lograron concluir una carrera.   Finalmente casi 7 personas tienen estudios de posgrado (maestría o doctorado).

En estas transiciones, primaria-básico; básico-diversificado y diversificado-universidad, se pueden observar unas gradas o fuertes quiebres.  Estos se puede explicar desde el sistema educativo por la cobertura limitada de los ciclos básico (7 a 9 años de escolaridad), ciclo diversificado (10 a 12 años de escolaridad) y la universidad (de 13 años a más de escolaridad).   Únicamente en primero primaria la cobertura logra llegar a casi la totalidad de las personas entrevistadas.  

La ampliación de la cobertura en el nivel medio ha sido importante, pero en muchos casos los nuevos espacios para este nivel se encuentran en el área urbana o donde ya existían centros educativos, pero que no eran suficientes para la demanda.  Por ello estos nuevos puestos no se distribuyen de manera “equitativa” entre la población.  A continuación se presenta la gráfica de la trayectoria educativa de los jóvenes encuestados en el 2011 por el estrato social, esta variable está presente en la base de datos y permite observar como el origen social influye en el número de años de escolaridad.


El estrato 1 es el más alto y el 6 es el estrato más bajo.  La línea roja horizontal hace un corte en el 0.5 por lo que corta el 50% de las personas por estrato.  En el caso del estrato 6, el más bajo, se observa que casi el 90% llegaron a primero primaria y el 50% llega a primero básico, el 30% llega a diversificado.  En contraste el estrato 1, el más alto, se observa que el 100% ingresó a primero primaria y a primero básico, es decir que este estrato no tiene perdida de estudiantes durante la primaria y a diversificado ingresa prácticamente el 100%.

Contrastando el estrato más alto y el más bajo se observa que la totalidad de las personas del estrato alto logran concluir el diversificado y en el estrato más bajo un 10% no llega a primero primaria, solamente el 50% llega a primero básico y menos del 30% logra concluir diversificado.  En el caso de la universidad se observa que el 9% del estrato más bajo logra llegar y más del 75% del estrato más alto.

Es importante observar que la muestra está conformada por personas entre 15 y 29 años, esto tiene como consecuencia que los entrevistados entre 15 y 18 años aún están en proceso de concluir el diversificado y los de 19 a 27 de realizar estudios superiores.  Pero teniendo claro esto y del problema de la exactitud de los datos para el ciclo diversificado y, principalmente, para el nivel superior, los datos obtenidos dan una idea de las diferencias entre estratos de los años de escolaridad obtenidos y permite señalara que estas diferencias se deben a los costos que implica la educación de las nuevas generaciones para las familias.  Las familias con recursos logran que sus hijos lleguen a tener más años de escolaridad y las familias con menos recursos tendrán hijos con menor escolaridad.

La ampliación de la cobertura educativa tiene como objetivo que los costos en educación sean muy bajos, de tal forma que las familias con menos recursos no tengan problemas para que sus hijos logren obtener más años de escolaridad, y con ello mejores opciones de trabajo y de ingreso.  Pero la ampliación de cobertura no logra superar completamente las diferencias del origen social.

En las sociedades industrializadas se ha observado un fenómeno durante el proceso de ampliación de cobertura donde las diferencias del origen social siguen pesando, esto ha sido explicado como la hipótesis de la "Desigualdad Máxima Mantenida".  Ésta señala que la ampliación de la cobertura educativa beneficiará primero a las personas de los estratos más altos que no han podido estudiar.  Cuando la gran mayoría (o totalidad) de las personas de los estratos altos tengan acceso a la educación serán las personas de los estratos medios quienes ocuparan aquellos espacios que se vayan creando con la ampliación de la cobertura educativa.  Finalmente ocurrirá lo mismo con los estratos bajos.  En otras palabras el peso del origen social en la escolaridad se mantendrá, incluso puede aumentar, durante el proceso de ampliación de la cobertura educativa, por lo que la ampliación de la cobertura favorecerá en primer lugar a los estratos altos y posteriormente a los bajos.  Esto permitirá observar que las diferencias entre estratos aumentan y disminuyen durante el período de expansión educativa.

En Guatemala la cobertura universal, entendida esta como aquella que cubre a más del 90% de población en edad escolar, se logra en primaria, por lo que las diferencias en este nivel son menores entre estratos y mayores en los niveles y ciclos siguientes.  Por lo que la explicación de la Desigualdad Máxima Mantenida puede ser aplicada para explicar las diferencias educativas en los países en vías de desarrollo, donde aún no se tiene cobertura universal en los diferentes niveles educativos.

En el caso de las diferencias por sexo  se observa que los varones tienen una mayor presencia en la escuela que las mujeres.  Esto se da porque la sociedad guatemalteca se prefiere enviar a los varones a la escuela y no a las mujeres, de la misma forma es más fácil que la mujeres salgan de la escuela y las familias tienen una mayor disposición a realizar un esfuerzo porque sean los varones los que continúen estudiando.  Pero en la medida que aumenta en nivel educativo los "costos" por seguir los estudios son mayores, ya que al no existir cobertura las familias deben tener recursos y estar dispuestos a usarlos en la educación de los hijos, y los sectores medios y altos tienen más recursos para sumir los costos.

Por estrato se observa que las mujeres de clases bajas tienen menos presencia en la educación que los varones, pero las mujeres de las clases altas tienen una asistencia semejante a los varones.  Por lo que la ampliación de la cobertura  permitió que las mujeres de clase alta tuvieran acceso semejante al de los hombres, pero la cobertura no ha sido lo suficientemente fuerte para que se dé una igualación entre los hombres y mujeres de las clases bajas.


Pero el sexo sigue siendo una característica importante para explicar las diferencias de acceso y el comportamiento de la interrupción educativa.  Si bien la diferencia en el ingreso en primero primario es solamente de un 2%, ésta aumenta a más de un 10% en la transición de primaria al ciclo básico, siendo las mujeres las que salen con mayor intensidad en la primaria y el ciclo básico.  Las diferencias disminuyen en los últimos años de universidad y son las mujeres las que logran tener niveles de posgrado más altos.

En relación al origen lingüístico de los jóvenes se observa una mayor variación entre aquellos que reportaron el idioma materno un idioma indígena y los que reportaron un idioma materno no indígena.  Estas diferencias son mayores, por ejemplo a primero primaria ingresaron el 97% de las personas cuyo idioma materno no es indígena, mientras que para aquellas personas cuyo idioma materno es indígena fue casi un 89%.  Estas diferencias se amplían en el ciclo básico y diversificado, donde más del 77% de los entrevistados que reportaron un idioma materno no indígena logran ingresar al ciclo básico, en contraste con el  46.5% de los que reportaron que su idioma materno era un idioma indígena.




El idioma materno es una variable importante en la diferencia de permanecer en la escuela y en el nivel de logro educativo, calculado en años de estudio.  Más del 50% de las personas que reportaron como idioma materno un idioma indígena interrumpen sus estudios antes de primero básico.  Para el caso de aquellas personas cuyo idioma materno es el español se observa que el 50% ha interrumpido la trayectoria educativa al concluir el ciclo diversificado.  El idioma materno, y con ello el origen étnico, de la persona se constituye en una variable relacionada con fuertes diferencias en los años de escolaridad.  La hipótesis de la reproducción puede tener un fuerte peso en este sistema educativo, ya que la cultura (y el idioma en que se transmite) en la educación guatemalteca ha sido la occidental, por lo que aquellas personas que se crían en una cultura (y lengua) occidental tendrán ventaja sobre aquellos cuya cultura (e idioma) sea indígena.  Pero existen algunos esfuerzos porque se aprenda a leer y a escribir en el idioma materno y por el desarrollo de una educación intercultural.   

A partir de esta información se pueden dar algunas conclusiones:

La primera es que la cobertura educativa de la primaria es casi universal para primero primaria, esto permite observar diferencias importantes entre los jóvenes y las generaciones adultas de inicios de la segunda década del siglo XXI.  Pero existe un buen porcentaje de jóvenes que interrumpieron sus estudios por lo que no lograron llegar al noveno grado (3o. básico), que la constitución de Guatemala señala como obligatorio de garantizar.

Segundo, las personas que están interrumpiendo sus estudios, ya que la escuela no los logra retener, son los que pertenecen a los estratos más bajos y en contraste las personas de los estratos más altos permanecen en el proceso educativo.  Por ello se observa que los orígenes sociales de las personas están influyendo en la permanencia o no del trayecto educativo.

Tercero, las transiciones educativas primaria-básico; básico-diversificado y diversificado-universidad, permiten observar fuertes quiebres que hacen referencias a un buen porcentaje de personas que interrumpen sus estudios en estos puntos.  Por lo que se propone la hipótesis que estas personas no continúan sus estudios debido a que no tienen donde hacerlo (cobertura) o no cuentan con los recursos para costearlos.

Cuarto, los hombres permanecen un poco más en el trayecto educativo que las mujeres, pero esta diferencia no es muy alta y la distancia entre hombres y mujeres es prácticamente inexistente en los niveles educativos más altos. 

Quinto, las diferencias a partir del idioma materno (indígena - no indígena) en Guatemala tiene una gran importancia para explicar la interrupción de la educación, evidenciando parte de la exclusión en la que se encuentran las minorías étnicas en Guatemala.  

Finalmente, se observa que la población joven en Guatemala tiene más años de educación que el promedio de la Población Económicamente Activa -PEA-, por lo que se pueden observar ya parte de los resultados de los esfuerzos de ampliación de la educación en los últimos años del siglo XX y los primeros del siglo XXI. Pero esto no garantiza que se tengan mejores oportunidades de trabajo y de ingreso, ya que el mercado laboral depende de la inversión y de las condiciones laborales existentes en la sociedad.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Cada vez menos ingresan a la escuela: observación a partir de la tasa neta de ingreso en Guatemala.

La tasa neta de ingreso en el primer grado de primaria es la razón del número de alumnos matriculados por primera vez en primero primaria con la edad oficial (para el caso de Guatemala es de 7 años) entre el número total de personas con esa edad para el lugar donde se está calculando, esta se calcula a partir del censo y la tasa de crecimiento.  El resultado se expresa en un porcentaje donde se observa cuantos de los niños en edad de estar en primero primaria ingresaron a ese grado.

Este dato es diferente a la tasa neta de cobertura que en Guatemala se calcula a partir del grupo de estudiantes inscritos que tienen entre 7 y 12 años (rango de edad en la que se espera se curse la primaria) y el total de la población del lugar que se encuentra en ese rango de edad.  Para este último dato se utiliza también la proyección que realiza el Instituto Nacional de Estadística, a partir del último censo realizado.

El objetivo de la tasa neta de ingreso en el primer grado de primaria es proveer información más exacta sobre el acceso a la primaria de aquella población en edad de ingresar a la primaria, si el porcentaje es muy próximo a 100 se puede señalar que se está alcanzando la universalización del acceso a la primaria. 



En los últimos 4 años en Guatemala este indicador ha ido bajando, pasando de un 71.64% en el 2009 a un 51.97% en el año 2012.  Dentro de las limitaciones de la Tasa Neta de Ingreso esta que solo se observan los estudiantes que tienen 7 años cumplidos, pero en primero primaria se pueden encontrar estudiantes de diferentes edades.  Por ejemplo, para el año 2006 en primero primaria había estudiantes con edades entre 5 y 13 años cumplidos al momento de iniciar el ciclo.  Casi un 5% tenían 5 años; un 20% tenían 6 años; un 45% tenían 7 años, un 18% tenían 8 años y un 8% con 9 años, el porcentaje restante está entre los 10 y los 13 años.

Estos datos permiten observar que la Tasa Neta de Ingreso era del 45% en el año 2006, pasando a casi un 72% en el 2009, bajando a un 59.97% en el 2012.  Es decir que en los últimos años ha existido un aumento de la Tasa Neta de Ingreso y posteriormente una reducción.  Este cambio de tendencia,  ir aumentando y luego cambiar hacia la baja, también se observa en las tasas de cobertura, en la tasa neta pasó de 98.68% en el 2009 a 89.11% en el 2012 y en la tasa bruta pasó de 118.63% en el 2009 a 107.95% en el 2012.

Ante estos resultados se puede plantear las preguntas (1) ¿Qué puede estar explicando esta tendencia a la baja en la cobertura educativa de primaria en Guatemala? (2) ¿Hay cambios en la política pública en el año 2009 que pueden explicar el cambio de tendencia en la cobertura?

Las preguntas planteadas son distintas, la primera tiene un sentido centrado explicar el cambio, la segunda está enfocada en una posible causa, en este caso son los "cambios en la política pública".  Si bien la política educativa ha tenido cambios mínimos entre los gobiernos, si han existido cambios en las políticas de apoyo a los sectores más vulnerables.

El cambio radica en que, durante el gobierno del 2008 al 2011 se impulsó un programa de transferencias condicionadas.  Que buscaba apoyar a las familias con recursos económicos a cambio de que estas enviaran a sus hijos a la escuela y periódicamente asistieran al centro de salud.  De esta manera se impulsó que los sectores más pobres accedieran a más educación y a más salud.

Con el cambio de gobierno, que inició en el 2012 y concluye en el 2015, el programa de transferencias cambió.  El cambió radica en que las transferencias no están vinculadas a la asistencia de los hijos a la escuela y al centro de salud.  Esto permite incluir en estos programas a familias que no necesariamente tengan infantes pequeños y/o en edad escolar.  Esto es algo positivo en el presente porque se atienden a personas de la tercera edad, por ejemplo, pero tiene un impacto devastador para el futuro ya que no se está influyendo en una de las variables que podrían cambiar la situación de las familias que se están apoyando.

Probablemente existen dentro del grupo de familias apoyadas con el programa, aquella que tienen infantes pequeños y/o en edad escolar, y si bien están recibiendo transferencias tenderán a no enviar a sus hijos a la escuela.  ¿Cómo se explica esto?

Se explica porque las personas actúan de forma racional y tenderán a actuar cuando tenga una mayor ganancia o el nivel de satisfacción sea mayor.  Pero si bien todos actúan de forma racional, las decisiones dependen de factores sociales como aquello que se valora.  Estas diferencias están marcadas por las clases sociales o los estratos socio-económicos a los que se pertenece.

Por ejemplo, dividamos la sociedad guatemalteca en dos grandes clases o grupos socio-económicos: aquellos que tienen las necesidades básicas satisfechas y los que no.  Los primeros que tienen lo necesario para vivir en el presente tenderán a tomar decisiones que les permitan vivir mejor en el futuro.  Par ellos la educación es un recurso que les permitirá a sus hijos mantener o mejorar la posición en la estratificación social.   El grupo que no tiene las necesidades básicas satisfechas estará preocupada principalmente en el presente ya que no tienen lo necesario en ese momento.  Este grupo tiende a valorar todos aquello que le permita comer hoy y no se preocupa del futuro, por ello la educación no se ve como alternativa, ya que el enviar hoy a los niños a la escuela no representará un plato de comida en la mesa para el medio día, habrá que enviarlos 200 veces a la año por más de 12 años para que esa educación pueda traducirse en mejores condiciones personales para una oportunidad de empleo mejor remunerado.  Ante esto es incoherente esperar que aquellas familias que no tienen las necesidades satisfechas en el presente envíen a sus hijos a la escuela, si esto no les va a representar en el presentes una satisfacción de alguna de sus necesidades.

Esta explicación, simplista y muy general, tiene un termino muy ambiguo: "necesidad básica".  Ya que usualmente la definimos desde el observador como una lista de bienes y servicios, que al tenerse completa en la familia se estará en condiciones para pensar en el futuro.  Pero las "necesidades básicas" son un concepto que depende de la clases social o del estrato socio-económico en el se encuentra la persona.  No son las mismas necesidades que tiene un joven campesino de 14 años en área rural del Peten, que otro joven inmigrante en Guatemala de 16 años.  Lo mismo se observa en las familias.  Hay familias campesinas donde están presentes los abuelos, padres, hermanos, primos, tías, etc. y tendrán unas necesidades, hay familias urbanas conformadas por la madre y dos hijos.  Imaginar las necesidades básicas para cada caso es un ejercicio interesante pero solo se tendrá la hipótesis que aquello imaginado son en realidad las necesidades básicas del caso.

En conclusión, las personas son racionales, esto hay que tenerlo en cuenta al momento de hacer una pequeña modificación en la política pública, ya que puede tener consecuencias no esperadas.  Pero también tomar en cuenta a que clase social o estrato socio-económico se encuentra la persona, ya que esto influyen fuertemente en las preferencias.

domingo, 2 de febrero de 2014

Especulación educativa: buscando la educación más "rentable".

Es viernes y se observa, frente a la puerta de uno de los colegios más prestigiosos de Guatemala, una fila de personas.  Ya pasó la hora de entrada para los estudiantes que iniciaron estudios a mediados de enero.  Las personas de la fila son padres de niños que en unos años iniciaran la vida escolar.  Y el colegio ha convocado para el sábado, a las nueve de la mañana, a los padres de familia que están interesados en que sus hijos estudien en ese colegio para que se inscriban en una lista.  Quienes se logren inscribir, ya que solo aceptan a 200 aspirantes, iniciaran el proceso de selección un par de años después.

Las personas comentan que hace unas semanas salió publicado un ranking de los mejores centros educativos, el cual se construyó a partir de los resultados que obtuvieron los estudiantes graduandos del ciclo diversificado (último año de la secundaria en Guatemala) en las pruebas estandarizadas que realiza cada año el Ministerio de Educación.  Estos padres y madres están dispuestos a hacer fila por más de 24 horas como si fueran adolescentes que van a un concierto del cantante o grupo musical favorito, situación que a algunos -que no tienen los recursos o la disposición de dedicarlos a la educación de sus hijos- causa alguna gracia. 

Estos padres están preocupados por la educación de sus hijos, y buscan el mejor lugar para que ellos aprendan.  Esta preocupación se da porque dentro de su imaginario esta la idea de que la mejor educación tendrá como consecuencia varias cosas:

1) un mejor estatus, ya que no es lo mismo concluir el bachillerato en el mejor colegio de la ciudad de Guatemala que un el colegio cualquiera que nadie conoce y si lo conoce es por malo.

2) Un mejor capital social, ya que tendrá la oportunidad de conocer a otras personas y seguro entre ellas habrán futuros políticos (as), empresarias (os) o académicos (as) destacados del país.  Como también tendrá la oportunidad de tener amistades y noviazgos con personas que proceden de familias con las mismas expectativas y con los mismos (o más altos) orígenes sociales. 

3) Mejores oportunidades educativas postsecundaria, ya que a las ofertas educativas universitarias a las que aspire le será más fácil ingresar por el lugar donde estudió, ya que en ese lugar aprendió más (o se cree que lo haya hecho).   Y con ello asegurar una carrera profesional exitosa.

Curiosamente estas consecuencias, entre otras, también benefician a los padres de los niños.  Ya que los padres tendrán un estatus por el lugar donde sus hijos “han logrado” ingresar.  Los padres tendrán la oportunidad de convivir con los padres de los amigos de sus hijos, muy a menudo los que quieren tener contacto con los padres de los compañeros de sus hijos son padres que necesitan esos vínculos para ampliar su capital social. Y finalmente, con la carrera exitosa, los padres logran la satisfacción de que sus hijos han mantenido o mejorado en la posición social en la cual nacieron.

Ante esto se puede decir que estos padres de familia ven la educación como una inversión, ya que los recursos (dinero, tiempo, etc.) que están dedicando a la educación de sus hijos tendrán como consecuencia un retorno.  El ranking de colegios permite que las personas puedan imaginar a futuro los retornos que pueden tener a partir del lugar que ocupa el centro educativo en el cual están, o estarán, estudiando sus hijos e hijas.

Hay que tener en cuenta que esta situación no se ve exclusivamente en la ciudad de Guatemala, o en los establecimientos privados.  En el caso de las instituciones públicas se encontrará que las familias con pocos recursos disponibles para educación buscarán aquellas ofertas educativas donde no se paga, pero ante la gran demanda los costos (dedicación de recursos como tiempo, dinero, etc.) para ingresar aumentan y los padres están dispuestos a hacer grandes esfuerzos y dedicar los pocos recursos que tienen con tal de que sus hijos estudien y en el futuro tengan mejores condiciones.  La diferencia central entre las familias que cuentan con recursos y las que no es que un chico de familia con recursos que no logra entrar a uno de los colegios de prestigio podrá asistir a otro no tan bueno, mientras un chico de una familia sin recursos que no logra ingresar al centro educativo público tendrá que interrumpir su trayectoria educativa.  En ambos casos queda una sensación de fracaso.

Esta situación permite observar que en la actualidad la teoría del capital humano está presente en la sociedad guatemalteca y que se ha mezclado con un individualismo tal donde la demanda de una educación de calidad no es social, sino individual.  La idea de que hay que invertir en educación y buscar la mejor institución donde la inversión individual tendrá el mayor retorno en el futuro, puede ser llamada una especulación educativa.